¿Cómo educar en la MASCULINIDAD?
Entrevista a la Dra. Rosario Laris.
– Ayudas: https://www.patreon.com/pjavieroliveraravasi
CURSOS https://cursos.quenotelacuenten.org/
– Editorial y librería: https://editorial.quenotelacuenten.org/
– Youtube:AQUÍ y active la campanita.
– Whatsapp: Haga clic AQUÍ y envíe un mensaje con la palabra ALTA.
– Telegram: Suscríbase al canal aquí: https://t.me/qntlc
– Twitter: https://twitter.com/PJavierOR
Pingback:¿Y si pensamos que durante esa noche… – AleMaraGomezCejas
Se educa en masculinidad cuando el niño deja de ser niño y pasa a ser educado por hombres y no por mujeres. Su padre es el ejemplo a seguir.
Como el destino del hombre (y el de cualquier animal ) es perpetuarse como especie y para ello, como también hacen los mamíferos, se hace con una familia, el niño deberá ir adquiriendo todas aquellas cualidades/virtudes/experiencias que le permitan cumplir sus fines hasta que por la edad sea capaz de independizarse de su familia y funde él mismo una familia (deje de ser hijo para ser marido y padre)
En cierto modo eso mismo es lo que, desde que el mundo es mundo, el niño, entre los 8 y los 10 años, empieza a aprender el oficio, normalmente ayudando a su padre, que le permitirá independizarse económicamente y poder mantener a su propia familia.
Para esto, el hombre, que es un ser de conocimientos/cultura y no de instintos, como los animales, puede/debe desarrollar una serie de comportamientos que le permitan tener éxito en su misión vital.
Naturalmente aprendemos copiando inconsciente a nuestros padres. Ese es el primer paso y el más básico.
Puesto que vivimos en un mundo hostil, hay que aprender a enfrentarse a él para poder cumplir sus fines vitales (también los profesionales). Ahí van las virtudes cristianas, el estoicismo y la proactividad.
A finales del siglo XIX surgió en el mundo anglosajón, precisamente por hacerse esta misma pregunta en un mundo en que la vida era cada vez más confortable debido a la industrialización, un tipo de educación cristiana que se ha llamado (muchas veces irrisoriamente) «muscular christianity» basada en la práctica de los deportes.
En cierto modo, los scouts (Sir Baden S. S. Powell) y los scouts católicos (P. Jacques Sevin sj, declarado venerable en 2012) forman parte de esta visión educativa. Con bastante éxito, hay que decir.