Justicia social e impuestos. Con Fernando Romero Moreno
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Entonces, cuál es la solución a
las necesidades básicas, entre otras: salud, educación?
Trabajar y no parasitar.
Justicia Social parece que fue una doctrina pontificia intentando aplicar las doctrinas de Jesús a una nueva realidad: el mundo capitalista. Eso lo estudiábamos en las clases de religión.
Curiosamente un campeón de esta doctrina fue el general Francisco Franco, dictador vitalicio de España.
Como él era católico y el régimen era oficialmente católico, empezó en algún momento a efectivamente aplicar políticamente esta doctrina (de hecho él fue el que implantó en España el Estado del Bienestar de la sociodemocracia europea (parece ser también que Eva María Duarte de Perón le afeó no proteger al obrero ) ).
A este fin, en algún momento funda en la Abadía benedictina de la Santa Cruz, cerca de la capital Madrid, un centro de Estudios Sociales donde se reunían teólogos, profesores universitarios y ministros para poder ver cómo aplicar esta doctrina pontificia en la legislación; y luego se aplicaba). No sé qué éxito tuvo esto, pero el centro lo cerró el gobierno de la democracia.
Otra iniciativa muy interesante en este tema es lo que se llama «distributismo», que es una elaboración económica que intenta ser una alternativa al comunismo y al capitalismo. Está basada en los escritos sociales de León XIII (Rerum Novarum) y Pio XI (Quadragesimo Anno). Los autores son los famosos apologistas católicos ingleses G.K.Chesterton (el apóstol del sentido común ) y Hilario Belloc.
Parece que este tipo de doctrina se ajusta mejor al alma africana.
Yo lo que veo es que por una parte las fuerzas del mercado (básicamente la oferta y la demanda) son las que imponen los precios, tanto de las materias primas como de los medios de producción (salarios).
Por otra parte, la justicia social implica que el político dirija la economía, lo que en el mejor de los casos hace que no se desarrolle como deba y en el peor la estropea, como sucede con todo dirigismo, además de dar un poder indebido al político.
Además esto justifica que haya gente que crea que tiene el derecho a vivir del trabajo de los demás y, en un pais democrático tiene la consecuencia de que votará «socialismo», que efectivamente le prometerá que va a vivir parasitando del vecino a cambio de su voto.
Una vez en el poder, el socialismo, como cualquier fuerza política, intentará eternizarse en la poltrona y, para ello, como hizo en España, lo primero que hace es cerrar las fabricas que puso Franco a cambio de ayudas sociales. Luego, intentar eliminar poderes autónomos concurrentes, como la Iglesia Católica, lanzando campañas para descatolizar la sociedad con la excusa del «lacismo y principios republicanos» masónicos. Desde hace años, con el voto obrero, que cree que le defiende, importa masivamente musulmanes a los que paga para vivir y tener hijos.
Últimamente, en sus políticas de re-proletarización de España («de-crecimiento»), se ha dedicado a destruir los embalses de agua que construyó Franco con la excusa ecológica (con este Presidente ya llevan unos 200 demolidos). Y esto en un pais que no tiene agua. Este año ha perdido íntegra la cosecha de trigo y la de aceite de oliva por falta de lluvia.
Una cosa muy curiosa es que así como Franco construyó por toda España muchísimas casas de precio social (barato) para obreros y gente de pocos ingresos (además de realojo decente para los pobres de villas miseria) , con la democracia todo esto desapareció y ahora nadie puede comprarse una casa, porque los políticos controlan el precio (no permitiendo construir y así encareciendo lo que hay) de modo que una casa vale 4 veces más que con la dictadura.
He intentado subrayar los pros y las contras del intervencionismo.
Hay que decir también que lo que llaman «neoliberalismo» y que se ha centrado en promover los intereses de las multinacionales y el desarrollo financiero ha perjudicado en todas partes menos en China la producción nacional y con ello el nivel de vida de la población
Algo me da que si fuésemos mejores católicos -y especialmente si los políticos tuvieran temor de Dios- no tendríamos tantos problemas.
Respecto a Francisco, SSD y PM (AMDG) LGTB y PACHAMAM, su falta total de conocimiento económico, sus ocurrencias narcisistas y la pérdida de su autoridad moral hace que no merezca la pena mencionarle.