Misoprostol: un remedio para la izquierda liberal
La imagen blasfema es de @julietaarroquy
Parece que la izquierda periodística está de capa caída.
Lo decimos porque, desde hace más de veinte años venimos leyendo, para purgar nuestros pecados y para saber qué piensan (cuando piensan), un pasquín de izquierda titulado Página 12.
Aunque en las antípodas de nuestro pensamiento y totalmente ideologizados, este diario supo tener no sólo excelentes «tituleros» sino también, periodistas de muy buena pluma: concisos, directos y grandes vendedores de humo.
Pero todo decae…
Hoy, un tanto aburguesados, no sólo deben recurrir a pedir dinero en cada nota (o al imperialista «todes», «pibis» y «chauchis»), sino a la propaganda medicinal del capitalismo liberal.
Para ejemplo basta este botón: un artículo acerca del «misoprostol», el abortivo de moda para niños «bien» que, originalísimos, intentan publicitar con un dibujo alusivo al Santísimo Sacramento del altar, sabiendo que, la Iglesia, como habitualmente hace en estos casos, callará (la inquisición sólo existe para los fachos).
En fin; comunistas eran los de antes. Los de ahora, al parecer, han tomado su propio misoprostol.
Que no te la cuenten…
P. Javier Olivera Ravasi, SE
– Para realizar una donación voluntaria, AQUÍ
Para la suscripción a Youtube, hacer clic AQUÍ y activar la campanita.
PARA SUSCRIPCIÓN A LOS POSTS VÍA WHATSAPP, seguir estas indicaciones:
- Añadir a la agenda de contactos de su teléfono este número tal como está: 005491135809554 o bien +5491135809554 (pueden agendarlo como “Que no te la cuenten” o como deseen).
- Una vez agregado, enviar un mensaje vía Whatsapp con la palabra “ALTA” (es imprescindible enviar un primer mensaje para poder ser agregado a la lista). Ya está. A partir del próximo post comenzarán a recibir automáticamente las nuevas entradas en sus teléfonos.
Nuevo (Telegram): Canal para suscribirse https://t.me/qntlc
Ud. está recibiendo esta publicación porque aceptó su envío.
Gracias por el aporte o difundirlo
No sería inoportuno releer «Un mundo feliz» de Aldous Huxley, y luego, ¿por qué no?, «Nueva visita a un mundo feliz» del mismo autor. Y, para terminar de desperezarse «1984» de G.Orwell. Con su neo lengua, su 2+2=5… Además, claro está, su Gran Hermano, su Ministerio de la Verdad, etc. Ficciones literarias en que han caducado las categorías políticas que todavía insistimos en sostener, a pesar de su ineficacia real en tiempos del NOM.
Increíble, no puedo creerlo, se les pasó la mano.
De capa caída, aburguesados y mucho más, o menos, siguen sabiendo pegar donde más nos duele. Esa caricatura del Santísimo debe horrorizarnos. No nos acostumbremos…