Coma caca: no puede ser que millones de moscas se equivoquen
“Coma caca: no puede ser que tantos millones de moscas estén equivocadas”
Y me disculparán uds. por el uso de la coprolalia, pero el caso lo amerita.
Además, no me salió otra cosa luego de leer lo que acabo de ver en Infocatolica sobre lo que sucede en Alemania:
«En cuanto a la recepción de los sacramentos, la mayoría de los fieles espera que no se hagan excepciones pastorales ocultas, sino que se llegue a soluciones estructurales (…). Son solo pocos los fieles que rechazan rotundamente el acceso de divorciados casados de nuevo a la comunión (…). La mayoría de los fieles no comparte esa aprensión».
Entonces, si “la mayoría de los fieles” mañana está de acuerdo con la pedofilia, o con la violación o el homicidio, habrá que buscar una solución “estructural” según “la mayoría de los fieles”.
Y si mañana dicen que el Magisterio de la Iglesia ya no es tal, o que el Papa ya no es Papa, o que los sacramentos no lo son tal, entonces ¡adelante!
¡No señor; a otro perro con ese hueso! Que a uno no lo hicieron cristiano para seguir a las ovejas, sino a Dios.
Cada vez me convenzo más de que la segunda venida de Cristo tendrá un marco similar a la primera donde el Señor nos recordaba:
“‘Este pueblo me honra con los labios, pero su corazón está lejos de mí’. En vano me rinden culto, ya que enseñan doctrinas que son preceptos de hombres. Dejando el precepto de Dios, os aferráis a la tradición de los hombres” (Mc 7,7-8).
“Por amarga la verdad, debo echarla de la boca”.
Que no te la cuenten…
P. Javier Olivera Ravasi
Comparto Padre. No queremos seguir a las ovejas sino a Dios. Tampoco queremos pastores con «olor a oveja» sino a «santidad»..
Sí, Padre y cada vez hay más ovejas que se creen con derecho a tomar el lugar del Pastor, nuestro Señor Jesucristo. Hay que rezar mucho por la Iglesia y la perseverancia de los fieles, porque a veces existen disyunciones o divisiones que no son buenas entre los fieles y que solo acarrean confusión entre los más humildes de la Iglesia.
Debemos estar muy atentos. Debemos «velar», tener nuestras lámparas encendidas porque siembran confusión todos los días.
¡La Pucha! Parece que estamos viviendo en el mundo descrito en una novela de Hugo Wast.
Es curioso lo que dice el señor Gabriel pues en la Jornada Mundial de la Juventud celebrada en Río de Janeiro Su Santidad recomendó la lectura de Mateo 25. Yo lo tomé como un mensaje: hay que velar día y noche porque no sabemos ni el día ni la hora.
Cuando una persona está confundida, tiene un problema, un dolor del alma, un gran pecado que redimir o muchos o pocos defectos que corregir, no busca que le palmeen la espalda y lo lleven al grupito de los que están igual que ella. Quiere que alguien le muestre el camino, aunque sea duro y difícil, y por eso recurre a quien tiene autoridad para eso, y
es justamente el sacerdote. Que pena si uno o muchos sacerdotes se ABLANDAN para ponerse al nivel de nuestras necesidades y quieran consolarnos y hacernos SENTIR BIEN, QUE NO NOS PREOCUPEMOS. Resultado: cuántos seremos, Dios no lo permita jamás, los que caeremos como copos de nieve al infierno, empujados por el dedo invisible de ese PASTOR MEDIOCRE Y MALVADO representante del mismo demonio. Dios nos conserve la fe, a pesar de lo que se viene. Cada vez más hay que pedir fuerzas para soportar la verdad tan dolorosa del estado de nuestra Santa Madre Iglesia. Hay que rezar mucho. Gracias por mostrar insistentemente la verdad. Dios lo bendiga. Graciela.